viernes, 9 de mayo de 2008

UN REGALO ESPECIAL...

Ayer me regalaron un mate y la verdad fue
lindo recibirlo, porque me invita a compartir…
Me dio una enorme alegría con mezcla de
nostalgia porque desde que tengo uso de razón el mate estuvo en momentos felices de mi vida…
Cuando niño esa imagen de verlos a mis padres
compartir su primera charla, muy temprano,
antes de irse a trabajar… Toda una postal de un verdadero ejemplo de amor con dialogo…
Después, cuando en grandes reuniones de familia,
me convidaban alguno que otro, me hacia sentir todo un adulto, que especial eran aquellos días entre primos, tíos y abuelos…
Ni hablar en mi adolescencia, cuando hacíamos ronda de amigos o nos encontrábamos en la plaza con alguna confesión de un primer amor,
o algún sueño por cumplir… toda la ilusión, la fe,
y la esperanza de cambiar el mundo, mejorarlo…
Por supuesto llegaron esos días de facultad,
y el mate no dejo de ser un amigo inseparable entre tantas horas de estudio… Y alguna que otra nueva experiencia…
Y como todo en la vida los años van pasando,
nos van cambiando, pero el mate sigue estando presente cuando comparto charlas con la gente que amo…
El mate siempre invita a compartir…

P/D: El que me regalaron sabe de charlas en la hora de descanso en mi trabajo…Algún día les contare algo sobre ellas…

(Muchas gracias Olga).

5 comentarios:

Cecy dijo...

El mate siempre a sido de compañia y como vos lo describis, asi se comporta conmigo. hasta es confesor de grandes charlas (entre el y yo)
Besos

ROBERTO CERVANTES P. dijo...

Te felicito por ese sentir tan humano. Yo aunque no nací con la cultura del Mate, he aprendido a disfrutarlo, aunque casi siempre solo. Tal vez los que vienen después de mi aprendan de haberme visto .
Gracias por tu visita a Mi Blog.
Un saludo

pennylanebcn dijo...

gracias por compartirlo con nosotros.

besos

¿Escritora o escribidora? dijo...

Sólo he tomado mate una vez en la vida.

Y fue encontrando a un argentino en la cima de un monte donde hay un templo... En Grecia...

Experiencia de lo más curiosa

Anónimo dijo...

Epa, qué sorpresa!!!
Nunca imaginé que algo tan pequeño, y este en verdad que lo es, podia despertar tantas sensaciones!!
Gracias por tus palabras que reconfortan el alma.
Te/ los quiero. Olga