—¿Qué mensaje le gustaría dejarnos?
—Teresa de Calcuta:
Amaos los unos a los otros, como Jesús os ama.
No tengo nada que añadir al mensaje que Jesús nos dejó.
Para poder amar hay que tener un corazón puro y rezar.
El fruto de la oración es la profundización en la fe.
El fruto de la fe es el amor.
Y el fruto del amor es el servicio al prójimo.
Esto nos trae la paz